Lo que comenzó como una relación envuelta por la primavera y la esperanza vive momentos de tensión dignos de competirle el prime time de la política al “wanda gate”.
No todo es color de rosas y los municipales, se sabe, son de mecha corta. Como nos tiene acostumbrados la gestiòn municipal mucha foto y marketing compartiendo reuniones con los gremios y especialmente con el màs importante de todos, la Unión de Trabajadores Municipales (UTM) para mostrar buena onda y paz.
Pero poco duró la luna de miel. Entre el aumento de la nómina de funcionarios, los maltratos de funcionarios, la quita de las facturas de la panadería, su histórico y antiguo secretario, Pedro Serrudo, ya venía anticipando hace mesas que pese a “contestar siempre el celular”, no estaban teniendo respuesta del Intendente runner, Emiliano Durand.
Así es que el martes convocó a sus filas para una protesta pacìficas en el Centro Cívico Municipal (CCM), terminó en un enfrentamiento campal entre municipales que estaban «reclamando derechos» y la Policía que intentaba a fuerza de empujones frenar el ingreso al estacionamiento.
Se sabía. Pedro Serrudo, había anunciado con tono solemne: »
Venimos trabajando desde que asumió Emiliano Durand, pero nos responden con la misma atención que un cajero automático fuera de servicio».
Entre oídos sordos y promesas de campaña que se derritieron más rápido que un helado en enero, los municipales dijeron: «¡Basta!”.
Por fin, los trabajadores lograron entrar al CCM, exigiendo ser recibidos por Emiliano Durand. Pero el intendente, estaba muy ocupado con sus videos filmando el alquitran y asfalto que con poca duración “taparán” los baches de la calle 20 de Febrero.
Y no es que Serrudo sea un santo. Sabemos que está donde está hace años a costa de extorsión y de acomodos pero eso no le quita peso ni legitimidad al descontento de los municipales de una gestiòn que fue puro marketing y pocas promesas cumplidas y que descansan en el histórico gremialista para encausar sus reclamos ante una gestión que cree que soluciona todo con mensajes, «sana sana» y reunioncitas.













